DYNAMO: ¿Crisis real o lo mismo de otros años?

La aplastante y humillante derrota ante New York Red Bulls el miércoles ha dejado a la fanaticada enfurecida y sintiendo unos miedos que ya ha sentido en los últimos tres años.

Vuelven las críticas feroces a los dueños (AEG en particular) por no fichar jugadores estrella, específicamente en la delantera. Vuelven los reclamos airados por que sienten a ciertos jugadores, sobre todo a Will Bruin y Jermaine Taylor. Vuelven las preguntas de por qué Dominic Kinnear no hace cambios en su once inicial a pesar de la mala racha.

Vuelven por otro lado las voces que dicen que aquí no pasa nada, que esto es normal. Vuelven los recordatorios de 2011, 2012, y 2013 donde Kinnear y el Dynamo superaron temporadas regulares inconsistentes para luego brillar en los playoffs.

Ante este transfondo una victoria ante Portland Timbers el domingo por la tarde se convierte en una obligación urgente. No ganar puede perder a los fanáticos y alborotar el hormiguero. Los dueños, Kinnear y los jugadores detestan las controversias y las críticas pero un empate o derrota solo añadirá leña al fuego.

El potencial para desastre existe y es latente. Si Brad Davis y Ricardo Clark no se recuperan a tiempo, si Kinnear insiste cabezudamente en la pareja Bruin/Barnes, y si el equipo vuelve a mostrarse lento, aburrido y sin ideas, ningunas relaciones públicas podrán evitar recuerdos del desastre de 2010.

Han sido más de cinco horas sin un gol. Sin Davis no hay ataque en condiciones. Seguimos viendo a los mismos fallar y fallar. Red Bulls, mientras tanto, puso en evidencia la lentitud y falta de coordinación en la zaga naranja. Taylor continúa siendo señalado por los hinchas.

Que AEG y Kinnear hayan arreglado situaciones similares anteriores da esperanza de que estemos ante algo temporero y ojalá sea así. Hay sin embargo señales muy preocupantes que hacen creer que esta vez el barco se hundirá en 2014. De todas formas, lo que hemos visto en los últimos tres años no va a ocurrir siempre y el Dynamo podría quedar fuera del playoff esta vez si no endereza el rumbo a tiempo. Aun es temprano para corregir.

El partido ante Portland aclarará mucho para bien o para mal.